Tu Amigo

Hola. Cómo has estado. Se, que al leer esto te llenarás de asombro, pero sentirás que te hablo. Se, que al leer mis palabras recordaras que siempre te he dicho que eres un ser especial. Si, se que piensas que esto es para ti y tal vez lo es, tal vez no, solo tú puedes saber y entender que:


 La amistad es un regalo de Dios para aquellos que saben valorarla. La amistad es para aquellos que en su corazón no albergan rencores ni amarguras. La amistad es para aquellos que sienten cuando el mal ataca a otros. La amistad es de aquellos que pueden entender cuando el mundo entero solo apunta con el dedo. La amistad es de aquellos pocos que pueden entender que la amistad lo único que posee es eso, el aprecio y el sentir incondicional de una satisfacción espiritual. La amistad solo posee eso, a la amistad y eso solo un amigo lo entiende.


Hace mucho que no hablamos, que no reímos, que no pensamos en ampliar nuestras fronteras. Hace mucho que no percibo tus emociones. Hace mucho que no siento tu esencia adornando los momentos en que juntos pasamos. Es decir, hace mucho que no compartimos, pero se que estás bien, sabes que lo estoy y eso nos basta.


Es que la amistad va más allá de lo natural. Va más allá del compartir. Va mucho más allá de las cosas que el mundo valora. Es que la amistad no es egoísta, por eso siempre resurge donde otros fracasan. La pregunta es por qué dar tanto sin recibir nada. La respuesta, en verdad no la se, pero quién necesita esa respuesta.


El amigo no necesita respuestas. El amigo crea la respuesta en el momento en que surge la duda y no se amilana al llegar la tormenta sobre el puerto de su amigo. El amigo suele ser el barco donde transportas tus sueños más frágiles, pero también suele ser el puerto que espera la llegada de ese barco que casi naufraga en la tormenta. El amigo no necesita respuestas porque es la respuesta a una plegaria de un ser desconsolado que no sabe a ciencia cierta cuándo llegará su hora.


Se, que en estos momentos te preguntas: ¿ Es real lo que vivo?, pero es que acaso aún dudas que un amigo es todo cuando todos son nada. Si, un amigo es la luz del faro, las estrellas de un cielo que su manto oscuro ha asomado. Un amigo es eso que te dice y mucho más, porque un amigo no necesita enseñar ni decir cuánto te valora. Un amigo actúa y no demora cuando lo incierto se ha convertido en tu realidad.


Un amigo suele ser tu realidad absoluta cuando la sombra cobija tu cielo y no hay luna ni estrellas para alumbrarte. Es el faro que guía tus pasos, que trata de evitar tu caída, pero si te caes, está ahí para sostener tu mano mientras te levantas.


Que más quieres que digas para que entiendas lo que escribo. Y que importa si no entienden, si comentan, si piensan, si insinúan e intentan destruir lo que nunca podrán tener, porque para poder tener un gran amigo, tienes que ser especial.


Si, eres especial. Por eso creo en ti y se que puedes vencer. Por eso escribo esto, porque se que de algún modo puede llegar a ti. Confía, no temas ser diferente, pero sin ser liberalista. La diferencia es muy simple; ser original y diferente no implica ser caprichoso y arrogante. Ese es un principio del egoísmo y ya dije que el amigo no es egoísta. En lo contrario. Un amigo se despoja de su yo absoluto, para entregarlo a manos llenas a aquellos que así lo merecen.


 Hoy quería escribir lo que nunca había escrito, lo que nunca había pensado, lo que nunca se me había ocurrido decir. Hoy quería hablarte a ti. Dejarte saber que nunca estás solo, porque si me llevas en tu corazón y tu mente, el recuerdo te hace sentirte acompañado.


 Los recuerdos y vivencias de un amigo son irremplazables. Es por eso que nunca se puede estar solo cuando te sientes amado por aquel que nada te quita y todo te da. Se que piensas que esto suena fantasioso, que es un capricho de una mente iluminada y ciega de amistad. Y es cierto. Un amigo es una mente iluminada por Dios para dejarte saber que Él quiere lo mejor para ti y ha mandado a uno de sus mejores ángeles para iluminar tu senda.


 Si, porque un amigo es un ángel que se aparece cuando lo necesitas, y pasa desapercibido cuando estás en tus momentos de gloria. Un ángel de luz, que solo sabe darte sorpresas cuando piensas que ya lo habías conocido todo.

Ya me retiro. Te dejo descansar. Solo recuerda que los amigos no se encuentran a menudo, pero cuando estás perdida(o) siempre encuentra la manera de cruzarse en tu camino. Un amigo puede dar lo que no tiene, solo para que tú bailes, rías y cantes mientras el observa sonriente tu galopar hacia el futuro.
                                                     
Att.
Tu amigo Johnny Berríos