Un Momento de Placer

 Un momento de placer, puede dejarnos una vida de remordimientos.

Seamos sabios a la hora de decidir que hacemos con nuestra vida y a quienes le permitimos la entrada a ella. El sol siempre brilla para todos, pero no lo hace permanentemente, llega un momento en el que nos deja momentanemamente para luego resurgir en un nuevo y resplandeciente amanecer.

Las oportunidades llegan, pero también se construyen si no llegan. No nos desviemos de lo que nos da paz eterna, por lo que nos da paz momentanea. Los momentos no se atesoran, se viven, pero recordando que deben ser momentos duradero y no efímeros.

Las personas que constantemente viven en la adrenalina del momento, nunca viven una vida plena. Son bombardeados por las luces de colores y se dejan llevar. Viven experiencias exitantes. Tienen mucoh que escribir en Facebook para presumirle a sus amistades, pero su corazón a fin de cuentas siempre está vacío. Cuando el sol comienza a caer en el horizonte estas personas vuelven a sentirse vacías.

No te dejes deslumbrar por lo que llega a la piel, deslumbrate con lo que llega a tu alma. Aquellas cosas que te dan paz interior nadie las puede borrar. Un momento de euforia llega y se va, pero puede dejar profundas huellas en tu vida. No te permitas fracasar. Al final del camino no habrás de medir tu vida por las cosas materiales, al final del camino habrás de medir tu vida por como has amado y como te sentiste amado.