Somos Lo Que Pensamos Ser.

Todo lo que somos es el resultado de lo que hemos pensado; está fundado en nuestros pensamientos y está hecho de nuestros pensamientos.
                                                                     Buda
 
Piensa con detenimiento esta reflección de Buda. Somos el resultado de lo que hemos pensado, nada más, nada menos. Por eso dicen que una persona positiva es capaz de llegar mucho más lejos que una persona instruida, aunque yo prefiero una conbinación de las dos.
 
Si no actuamos como pensamos, eventualmente terminaremos pensando como actuamos. Pon tus pensamientos en sintonía con tus metas e ilusiones en la vida y veras como tarde o temprano te conviertes en lo que piensas.
 
Los pensamientos tienen un poder transformador que puede mover montañas. Así que en el día de hoy; piensa en todo lo bueno que quieres lograr para ti y los tuyos. ve dandole vueltas al asunto en tu cabeza. Haz un plan de trabajo, pon en marcha tus ideas y no pares de despertar tus sueños.
 
Tus pensamientos son como un faro que su luz va girando alrededor, para que otros puedan ver y les sirva de guía a su destino. De igual manera tu seras guiado por el reflejo de tu luz, que son tus pensamientos, en la faz de aquellos que se crucen en tu camino. Así podrás ver su verdadera intención, así podras conocer su alma y toda esta interacción entre guiar y ver será lo que marque el rumbo hacia tu verdadera felicidad exterior. Digo exterior, pues existe otra felicidad que nos llena mas y es la felicidad interior. (La felicidad para mi se divide en dos; Interior (que es lo que pensamos) y exterior (basada en lo que hacemos y recibimos a nuestro alrededor), pero eso es otro blog.
 
Recuerda, tarde o temprano te convertiras en lo que piensas; así que cuidado con los pensamientos, pues si no estamos en control de ellos podrían dañarnos y dañar a otros.
 
 
 
Marca las horas de tu reloj con cada suspiro de aliento un segundo, con cada idea de progreso un minuto, con cada pensamiento definido una hora, con cada actitud positiva un día, con cada gesto de lealtad una semana, con cada sueño de felicidad un mes, con cada respiro de bondad un año y con cada gesto de amor una vida.
                                                   Johnny Berríos
 
 

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