No Entiendo

Como es que dicen adorar a Dios y maldicen en su nombre. Como es que dicen seguir a Dios y no siguen sus mandamientos. En verdad que estoy confundido. Es que acaso me perdí en alguna parte de la biblia, porque no he leído donde dice que puedes hacer lo que quieras y luego invocar su nombre. Donde dice acuéstate con quien tú quieras, ama a la mujer de tu amigo, ten todas las mujeres u hombres que quieras tener, mata a quien quieras matar, ten todos los abortos que puedas, roba, fornica, miente, destruye, blasfema y luego résame 3 padres nuestros y dos ave marías y listo. Ya puedes volver a empezar con tu vida pecaminosa que yo te lo perdonaré todo.



En verdad explíquenme eso, porque estoy perdido y sin idea. Las personas hoy día dicen amar a Dios, pero hacen todo lo que pueden por hacerles daño a otros. Ok ya entendí es que cuando alguien nos hace mal es pecado, pero cuando nosotros lo hacemos está completamente justificado porque yo soy un hijo de Dios, porque yo soy cristiano, porque yo voy a la iglesia los domingos. Increible, pero cierto.

Esta es la realidad de lo que vivimos hoy día con la mayoría de las personas. Viven una vida en pecado, pero piensan que con asistir un día a la iglesia, y cuando digo iglesia me refiero a todas las denominaciones, ya somos salvos. En verdad que están bien lejos de la realidad. No justifiques tus acciones diciendo que tú eres un hijo de Dios, pues a mayor conocimiento, mayor condenación. Ten cuidado con lo que haces, pues si estas en constante pecado y luego te paras frente a una multitud a decir que Jehová es tu salvador y que lo amas cuando en realidad ensucias su nombre cuando estas en la calle; piénsalo dos veces y vuelve a pensar que podrías estar ganando tu propia condenación.




Dios no está dentro de cuatro paredes, Dios está en tu corazón y en tus actos dentro y fuera de la iglesia. La hipocresía engaña al hombre, pero los ojos de Dios son mucho más luminosos. Así que antes de decir algo en nombre de Dios, piensa en donde estas parado y no justifiques tus actos impuros. Ama, ayuda, sonríe, vive, sueña, pero recuerda: “Al Cesar lo que es del Cesar y a Dios lo que es de Dios.”

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